Category:Instalaciones solares

La energía solar térmica se basa en aprovechar la energía que transmitida por los rayos del Sol y transferirla, generalmente a través del agua. Este tipo de energía es menos eficiente que la energía solar fotovoltaica pero está creciendo en popularidad a través de España y Europa, especialmente usada en el calentamiento del agua sanitaria y como apoyo a la calefacción. Esto hace que el consumo de electricidad de las compañías externas se reduzca a la vez que se alarga la vida de la caldera gracias a su menor uso.
A continuación desarrollaremos sus principales propósitos: calentamiento del agua sanitaria y el apoyo a la calefacción. Otras aplicaciones son también posibles aunque debido a su complejidad técnica y alto coste no es apto para su uso a nivel doméstico.
Agua Caliente Sanitaria
El sistema más sencillo y generalizado para la producción de Agua Caliente Sanitaria es a partir del termosifón. En un termosifón, el movimiento del agua en la instalación es realizado por la diferencia de temperaturas del fluido portador de calor, generalmente agua, que recorre la placa y el serpentín del acumulador. Ésta entra fría desde el contador y sale del acumulador cuando abrimos le grifo. Para el recorrido, es empujada por el agua fría y no necesita de bombas circuladoras.
Calefacción
Para que una instalación solar térmica apoye a la calefacción se necesita un sistema de circulación forzada. Esto quiere decir requiere de la aportación de una bomba que fuerce el movimiento del agua o glicol por el interior del circuito. Asimismo, tienen muchas placas solares (térmicas) y acumuladores, en el interior del hogar.